Además del valor artístico y catequético de su imaginería religiosa, la Semana se caracteriza por la devoción, sobriedad, silencio y respeto de los cofrades y el público, y por actos singulares como la Procesión General de la Sagrada Pasión del Redentor y el Sermón de las Siete Palabras de la Plaza Mayor, que recuerda a los autos de fe del siglo XVI. Por todo ello, esta celebración fue declarada de Interés Turístico Internacional en 1980, siendo de esta manera la primera celebración de la Semana Santa en España en ostentar dicha declaración. En 2014 se iniciaron los trámites para conseguir su reconocimiento como patrimonio cultural inmaterial de la Humanidad.
Pregón de semana santa:
Tiene lugar en la tarde del viernes de la IV Semana de Cuaresma, una semana antes del Viernes de Dolores. Cuando ha coincidido con la festividad de San José, 19 de marzo, se ha considerado apropiado trasladarlo de fecha, celebrándose el viernes de la semana anterior.
Desde 1990 se viene celebrando en la Catedral, por razones de solemnidad y aforo, tras décadas con escenarios itinerantes: el Ayuntamiento, la iglesia de San Pablo, la de San Benito o la Capilla del Museo Nacional de Escultura.
El pregonero es escogido por el Alcalde de una terna presentada por la Junta de Cofradías y que cuenta con la anuencia del Arzobispo. Es presentado, junto con el cartel oficial, a mediados del mes de enero.
En la tarde del pregón, el protocolo se inicia con la firma del pregonero en el Libro de Honor del Ayuntamiento, tras lo cual, acompañado por la Corporación municipal, se dirige a la Catedral, donde es recibido a la puerta por el Arzobispo y el Deán. Para la ocasión, se dispone en el altar mayor un montaje de figuras que rememora alguna escena de la Pasión, en ocasiones enmarcada en un gran decorado. El acto finaliza con una intervención musical. El texto del pregón es editado y publicado en forma de librillo por el Ayuntamiento, y puede adquirise en los puntos de la Junta de Cofradías, siendo una constante que, en la portada y la contraportada, figuren dos fotografías del montaje que presidió el pregón el año anterior
Sermón de las Siete Palabras
Cada Viernes Santo a mediodía, la plaza Mayor se transforma en un escenario que recuerda a los autos de fe del siglo XVI en el que un religioso, invitado cada año a tal efecto, reflexiona sobre las siete palabras que Cristo pronunció en la Cruz, delante de los respectivos pasos que las ilustran. Este Sermón, organizado por la Cofradía de las Siete Palabras, viene precedido de un pregón, consistente en un soneto, que es proclamado a lo largo de toda la mañana en distintos puntos de la ciudad. El pregonero, al que acompaña un cortejo a caballo, recoge el pergamino del pregón a las ocho de la mañana de manos del Arzobispo, en el Palacio Arzobispal, iniciándose el recorrido. A las once y media de la mañana, el cortejo a caballo se encuentra con la cofradía en la Plaza de Zorrilla, iniciándose la procesión hasta la Plaza Mayor, donde a las doce del mediodía da comienzo el Sermón.